domingo, julio 29, 2012

Sonrisa estampada

No se si te animaste a notar la ausencia de sonido en tus palabras, cada vez un poco más vacías, sin sentido y con menos ironía. Poco a poco la vejez te carcome la sonrisa, y te volves un poco más inestable, menos influyente y más aburrida. Será que mentiste demasiado en la historia que esperabas contar. Pero no sos conciente ni medio metro de la  razón que te hace virar. Son y serán tus fuertes los llantos en vano derramados. Y no me pidas pensar por tu razón, si hace rato dejamos de pensar; ya no tenes más esos vestidos de azar dibujados en la vidriera que era destinada para cantar algo más que los malos humores que te sabían aplacar. Es por eso que apagaste tu brillo en un diván del cual nunca pudiste regresar. Por ende te fuiste, partiste del  mundo racional, creaste tu universo cubierto de niebla para ocultar tus frente en un hogar que con su fuego de a poco quemó la poca ilusión de tu boca para recuperar una sonrisa estampada y un tatuaje de gena que nunca más se irá.

Santiago Abregú



viernes, julio 06, 2012

Para no cruzarnos

Estas de espaldas, o mirandome de frente, o ya me viste y no te vi. Pero estas. Estas quieta, medio incierta, despistada y desafinada. Relojeas entre el pelo si realmente soy yo, fingis no verme, preferis no verme, saber que el que esta ahí soy otro, soy el que no queres que sea ya. Y me miras un poco más, buscas el reflejo del vidrio para investigar. Y yo no paro de mirar, de decir la verdad. Estas ahí, parada, esquivaste la mirada, me pasaste por al lado, te acercaste a mi lado.  Me ignoraste, me dejaste atorado, encadenado a la valla incierta del desconcierto. Sabiendo que hacías lo correcto, que lo mejor era no verme, lo mejor era estar lejos.

Cruzaste, sólo para no cruzarme, y nos cruzamos, no nos vimos pero nos miramos. Nos miramos y si que fingimos. Creímos no vernos para saber que nos vimos, y en un futuro preguntarnos, fuiste vos quin estaba ahi sentado y decirnos. Fuiste vos la que prefirió no extenderme la mano.


Santiago Abregú