Castillos en el aire
Estas ahi, en la puerta del paraíso que abri hace más de un mes, encerrando con cariño besos en los recovecos de tu alcoba, vaciando los baúles de recuerdos que ya no queres compartir con el universo. Son castillos en el aire, son pedazos de tierra incrustados en lo más acérrimo de la tierra, son pequeños momentos que se quieren quedar en certezas. Intentaste parar las rotativas, mezclar el sabor de lo dulce con el pan de lo aguado, y caíste en la noción de los errores que te costaron nuestro fin en punto y coma, y tres puntos agregados. Lloras entonces sueños que se terminaron, y te imagino en el estado primordial de la realidad, visualisando lo que nada pudo suceder jamás. Y me intentas explicar con lágrimas que nunca más sucedió y nunca más sucedera, juras entonces que dejarás en mi la libertad de actuar, y poder seguir, de platicar con los hechizos embrujados de personas que miran en mí algo más que un numero cerrado.
A regañadientes entonces aceptaras la verdad certera de que tus ojos me he mudado, y que sigues recorriendo estos castillos flotantes con el fin de encontrar la explicación a esta situación que terminó y que por donde quiera que lo mires no va a volver. Pués la suerte ya tocó mi puerta, y yo ya derribe con lanzallamas la entrada y hundí con buques las paredes que de mi castillo flotante hicieron al fin de cuentas un mero recuerdo pegado en la pared de mi cuarto, mientras en los labios que me quieren descanso, poniendo paso sobre paso para volver a edificar un sueño hecho a medida, a medida de mi cuerpo y mis llantos, a medida de mis versos y abrazos.
Santiago Abregú
1 comentario:
okey, si lloré..
tiene palabras INCREIBLES
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