lunes, enero 02, 2012

Inconclusos V (Resaca 2011)

Paralelo

Desayunaste con abrojos, a merced de tus antojos, me veo obligado a escribir lo que no escriben tus ojos. Se acabo el tiempo de silencios, prendimos la sirena, largamos el fuego y soltamos los silencios. Perdimos la corriente que nos elevaba, explicamos los cantos con dueños, derivamos en malignos puertos sin dueño.

Caí entonces en la razón de todo, que fuiste lo que eras, sos lo que no quisiste y ahora me comporto medio roto por lo que queda del mundo que derribamos. Astutamente concluimos sin razón una canción que no afinaba en la menor, y compramos vestiduras de mentira para decidir que todo lo que tuvimos fue una pura rutina.

El duelo cae a la cuenta que se termina esta cuenta y mientras miro las fotos que guarde hace años en el cajón, repaso con llantos los laberintos que me fabricaste y concluyo que en este mundo perverso sos y fuiste un mundo paralelo.

Itinerario

No puedo evitar acordarme de tus lágrimas en el banco, y mi mano pidiendo que pares, que entiendas, que expliques, que superes y arrebates la razón por la cual esas lágrimas no quiero que se derramen nunca más. Espero que esos mensajes de paz en vano que te mande alguna vez no sean una mancha negra en nuestro triste itinerario. Sabemos que fuimos la falsedad que quisimos, que nos deshicimos de la realidad en el momento exacto que besamos nuestros labios, y fabricamos un cuento de hadas lleno de brujos internos que extirparon a gritos lo que nos pedía nuestro cuerpo.

¿Estas?

Ahora veo que estas, siempre estas, cuando no estas... estas, cuando volves, estas, cuando te hecho estas, cuando te nombro estas, cuando te odio estas, cuando te quiero estas, hasta sentada a mi lado estas.

Cuando te quiero amar no estas, cuando te quiero besar te vas, cuando quiero que estés desapareces, pero cuando intento eliminar de mi vida tu azar, estas.

Invisibles

Es increíble, no tengo ni fotos para hacer de vos un garabato. Deje gratis en mi cuarto espacios vacíos con la ilusión de volver a llenarlos, pero quedaron tapados por el cielo razzo descolgado. Pareciera que ahora caigo en la realidad de que no fuiste más que una realidad ilusa, que nunca fuiste nada y menos algo. Que mis adornos en el cuarto no eran más que amuletos fetichistas de un amor invisible a los ojos del resto.

Vimos en nosotros un futuro incierto, fuimos dueños de besos y sexo, de amor oculto y perdido, de suelos temblando y sueños que retuercen hasta los más melosos deseos. Pero nada de eso se ve reflejado en la resaca de esta historia. Ni tus besos en mi boca, ni tu cuerpo en mi cuerpo, ni el sueño de volver a ser un recuerdo incierto. Sólo entiendo, ahora... después de un tiempo, que esto que fuimos no fue más que ser, que no llegaste ni adornar mi cuarto con tu querer, y que de nosotros solo quedan piedras azules regaladas, que demostraban la frialdad con la que en el fondo... de lejos me mirabas.


Santiago Abregú

1 comentario:

Maru dijo...

che, piel de gallina..

muy bien por subirlos!