Pido perdón por el dolor que te ocaciono, mucho más por el que te ocacionaré, sólo pensearlo me estremece y me hace revolver. Revolver en mi mento lo que ya decididí mucho antes de parar. Estoy esperando el instante justo para no arrepentirme, estoy diciendole a mi mente que se calme, a mi corazon que no me delate, a mi silencio que no se calle.
Estuviste en el tramo final de una ilusión terminada, fuiste quien de a poco apagó las luces que nos iluminaban y es por esto, nada más que por esto que la tristeza me invade. Nunca peleaste por nosotros, mucho menos ahora. Nunca hiciste lo que te pedi para que esto no cayera, y sin embargo lo hiciste. Ahora que me queda pensar entonces... MIs ilusiones te putean a cada instante, y me agarra bronca de sólo pensarte y así, de a poco, entre las puteadas que enmarco en mi cabezaa, logro notar que ya con vos no quiero estar y por eso escribo esta última carta que se que me aliviará, y me dejara vivir un poco más en paz.
Santiago Abregú
quiza algún día la leas
1 comentario:
todo pasa, flaqui
se cierra una puerta, se abre una ventana, es la vida.
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